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LUGAR DE LA EDIFICACIÓN DE MÉXICO-TENOCHTITLAN. CÓDICE DURÁN

miércoles, 10 de marzo de 2021

Axayacatl -Cara de agua-

      El Consejo Supremo, muerto Motecuhzoma I, ofreció el señorío a Tlacaelel, quien lo rechazó.

    La sucesión de Motecuhzoma presenta rasgos extraños. Se sabe que al menos tuvo dos hijos varones, Iquehuacatzin y Machimalle, y el primero de ellos fue tlacatecatl, lo que le situaba en una posición favorable para ser elegido tlahtoani; ahora bien, ninguno de los dos llegó a ser nombrado para este cargo. El elegido fue un nieto de Motecuhzoma: Axayacatl -literalmente, Cara de agua-, vástago de Atotoztli, hija legítima de aquél, y de Tetzotzomoc, hijo de Itzcoatl.

Chimalpahin, en su Tercera Relación, ofrece el siguiente relato:

3 Calli, 1.469. En este año, en verdad, murió Huehue Moteuhcçoma Ylhuicamina, dejando dicho que gobernara Axayacatl; […] Enseguida se enseñoreó Axayacatzin, hijo del Tlatocapilli Teçocomoctzin y nieto de Itzcohuatzin. Y antes de que Axayacatzin se enseñoreara proponían que gobernara un hijo de Huehue Moteuhcçoma llamado Yquehuac; y el segundo al que proponían se llamaba Machimalle. Pero cuando Axayacatzin se enseñoreó, aquellos lo aborrecieron, y robaron el tributo de los coaixtlahuacas, y lo robaron asimismo sus madres las señoras del palacio; al descubrirse, huyeron y fueron a refugiarse adonde perecieron, perdiendo su nobleza y su honra.1

     Por otra parte, en los “Anales de Tlatelolco” se afirma:

En el año 6 Tecpatl [1.472] mataron Iquehuacatzin, quien iba a ser tlahtoani de Tenochtitlan.2

    De ello puede deducirse que ambos pipiltin, resentidos por su exclusión de la sucesión se apropiaron del tributo de Coaixtlahuacan y al ser descubiertos fueron perseguidos y asesinados.

     Diversas hipótesis se han efectuado sobre la separación en la línea dinástica de Iquehuacatzin y de su hermano. Quizás la más ajustada a la realidad haya sido la de que hubo una disputa sucesoria entre la facción más cercana a los tepanecas y la partidaria de los colhuas. Ambos hermanos eran hijos de madre procedente de Cuauhnahuac -Chichimecacihuatzin- y más cercanos a la línea tepaneca; prevaleció la tendencia colhua y fue elegido Axayacatl, que como se ha dicho era hijo de Tetzotzomoc -y por tanto nieto de Itzcoatl- y de una hija de Motecuhzoma -Atotoztli-.

    También podría ser posible que Tlacaelel, el poderoso e influyente cihuacoatl, hubiera intrigado a favor del nombramiento de un tlahtoani joven -Axayacatl solo tenía 19 años en el momento de su elección- por entender que sería más manejable que un experto y reputado militar.

    Sea cual fuere la razón, lo cierto es que Iquehuacatzin, Machimalle y sus descendientes fueron apartados de la línea sucesoria, que en adelante recaería en los herederos de Itzcoatl por vía paterna.


Manuscrito Tovar. Axayacatl coronado con la mitra - xiuhuitzolli - de tlahtoaniA su derecha el glifo representando su nombre -Cara de agua-. Fue el sexto de los tlahtoque de Tenochtitlan, no el octavo como figura en la lámina.

    A pesar de ser el menor este Axayacatzin gobernó primero; […] Cuando Axayacatzin fue elegido para gobernar, su hermano mayor Tizózic era tlailotlacatl, y su otro hermano mayor Ahuitzotl era tlacochcalcatl que es como oidores. Estos hermanos mayores menospreciaban y avergonzaban a su hermano menor Axayacatzin, porque cuando los mexicas iban a algún lado a combatir, Axayacatzin tomaba sus cautivos junto con otros. Así que sus hermanos mayores lo escarnecían, diciendo: "¿Será muy hombre Axayaca? ¿Realmente toma cautivos en la batalla? Según se dice, ¿no compra salineros esclavos y luego los trae a Mexico para aparecer como valiente?”. De esta manera sus hermanos mayores hacían de menos a Axayacatzin. Mas aunque nació al final, y era el menor, fue un gran guerrero huexotzinca; y por eso lo eligieron para que gobernara primero; la elección la hicieron los tlatoque Huehue Moteuczoma Ilhuicaminatzin, el cihuacóhuatl Tlacaelleltzin y Chimalpopoca tlatoani de Tlacopan: estos tres escogieron a Axayacatzin, nieto de Itzcohuatzin, para que gobernara primero en Tenochtitlan3.

    Atotoztli y Tetzotzomoc tuvieron tres hijos varones: Tizoc, Ahuitzotl y Axayacatl. Los tres serían tlahtoque de Tenochtitlan, aunque el elegido en primer lugar sería el último, el menor de los tres. Sus hermanos mayores lo desdeñaban dudando de su capacidad. Según la “Crónica Mexicayotl”:

    Efectivamente, como se deducirá de lo que a continuación se expone, demostró ser valiente guerrero y un discreto gobernante, que legó a su sucesor más territorios  que los que él recibió cuando accedió al señorío.

    Diversas fuentes dan fechas de duración de su mando entre 1.467 y 1.481 d.C. Si se acepta lo afirmado por Chimalpahin4, gobernó 13 años, ca. 1.469-ca. 1.481.  

Campañas militares

    Siguiendo la costumbre establecida por su predecesor, antes de la ceremonia de celebración de su ascenso a tlahtoani emprendió una campaña militar a fin de demostrar su arrojo y convencer a los pueblos sujetos de la fortaleza de la Triple Alianza. El objetivo fue la región de Tecuantepec -hoy Tehuantepec, en el Estado de Oaxaca- tomando, aparte de dicha ciudad, la de Xochitepec -Suchixtepec- y el importante puerto de Cuauhtolco -Huatulco- (Mapa 15). El motivo aducido fue el, ya citado como excusa, del asalto y muerte de pochtecas de las ciudades del Altiplano.

    A continuación hubo una contienda con Huexotzinco y Atlixco, a la que acudió Axayacatl acompañado de Netzahualcoyotl y de Totoquihuatzin de Tlacopan. Ambas ciudades quedaron sin conquistar y a la vuelta del conflicto, según Torquemada, falleció el dirigente tlacopaneca.

    Hacia 1.472 Cuetlachtlan -Cotaxtla- se había sublevado, siendo asesinado el gobernador impuesto en la anterior ocupación de la ciudad, por lo que se envió un ejército para reconquistarla. Tomada la ciudad sus dirigentes fueron ajusticiados, en su lugar fueron designados otros y se nombró un nuevo gobernador militar. Axayacatl explotó el éxito consolidando el control sobre otras ciudades de la Totonacapan, de la Huaxtecapan y de la zona del actual Estado de Puebla.

    El acontecimiento más notorio del gobierno de Axayacatl fue la anexión de Tlaltelolco, que desde 1.473, según la mayoría de las fuentes, deja de ser independiente, y pasa a ser dirigida por gobernadores militares impuestos por Tenochtitlan.

    Diversos son los motivos aducidos por los cronistas para la confrontación entre las dos ciudades gemelas mexicas: desde la más simple de que unos jóvenes tenochcas violentaron a unas doncellas tlatelolcas, a la que se refiere a la existencia de disputas personales entre los dos tlahtoque de ambas localidades. Moquihuix, tlahtoani de Tlaltelolco tenía por esposa a una hermana mayor de Axayacatl, a la cual sometía a vejaciones; además envidiaba a éste, por lo que decidió hacerle la guerra.

    Parecen más creíbles dos tipos de argumentos distintos.

    Según uno de ellos Moquihuix pudo querer aprovechar lo que él creía un estado de debilidad de la Triple Alianza, debido a los recientes fallecimientos de Netzahualcoyotl de Tetzcoco y Totoquihuatzin de Tlacopan, para imponerse a los tenochcas. Para ello solicitó en secreto el auxilio de diversas poblaciones, algunas de ellas sujetas a Tenochtitlan, como Tenayocan, Xochimilco, Mexicatzinco, Huitzilopochco, Cuitlahuac, Mizquic, Chalco, Xilotepec y Toltitlan, que le ofrecieron apoyo. Sin embargo se lo denegaron las ciudades de más allá de la Sierra Nevada -Huexotzinco, Tlaxcallan, Cholollan y Tliliuhquitepec-. Enterado Axayacatl de estos planes atacó antes de que la ayuda pudiese llegar, situando contingentes en las vías de acceso a Tlaltelolco. Después de diversos combates Moquihuix se refugió en lo alto del templo, desde donde fue arrojado escaleras abajo y muerto por manos de su cuñado. La ciudad fue saqueada y su templo principal quemado -acción de significado simbólico en la conquista de cualquier población-.

    Los tlatelolcas fueron sometidos a tributación, incluso a entregar esclavos, a aportar servicios personales en las obras públicas y a proporcionar cargadores del fardaje necesario en las futuras campañas de guerra.

    Los dirigentes de las ciudades que ofrecieron apoyo a los tlatelolcas fueron ejecutados y sustituídos por otros afines a los tenochcas, con lo que se generó un mayor grado de lealtad de los gobernantes de estas poblaciones hacia Axayacatl.  



Principales conquistas realizadas por Axayacatl hacia Oaxaca y la costa del Golfo. Los números no significan orden de conquista, sino referencia toponímica. Nombres actuales entre paréntesis.

 

 

1-Tecuantepec  (Tehuantepec);  2-Cuauhtolco  ( Huatulco);

3-Xochitepec  (Suchixtepec).

 

4-Cuetlachtan  (Cotlaxtla);    5-Quetzaloztoc  (Quetzaltotoc);  

6-Poxcauhtlan (Poxcautla); 7-Matlatlan (Maltrata); 8-Ahui-

lizapan (Orizaba); 9-Cuezcomatl-Iyacac; 10-Tototlan  (To-

tutla) ; 11-Mictlan  (San Andrés Mixtla);  12-Tlaollan  (Tlaquil

pa)13-Tetlicyoccan   (San Gabriel Tetzoyocan);   14-Tecalco

(Tecali de Herrera); 15-Tepeyacac (Tepeaca); 16- Otztoticpac

(Santa María Oxtotipan). 

 

 17-Tochpan  (Tuxpan);  18-Tzapotitlan  (Temapache);  19-

Xiuhcoac (Chicontépec); 20-Micquetlan (Mequetla).

 












    El segundo argumento, también posible, sería el de la conveniencia de Tenochtitlan de hacerse con la pujanza económica de Tlaltelolco, debida fundamentalmente a la labor mercantil de los pochteca, que extendían su comercio no sólo a las poblaciones del Altiplano sino a lugares tan alejados como las costas del Mar Océano5  y del Mar del Sur -hasta Guatemala-. Esta actividad, aparte de la riqueza que podía generar al estado por la apropiación de parte de los beneficios, sería de suma importancia por la utilización de los mercaderes como informantes y punta de lanza, en algunos casos, de futuras conquistas.

    Habiendo dominado los territorios mencionados y sujetado enclaves que cercaban a los tlaxcaltecas, los mexicas centraron su atención en el valle de Tollocan -Toluca, actual capital del Estado de México-, habitado, entre otros grupos, por los matlatzinca. El motivo fundamental de las expediciones que se emprendieron, aparte de anécdotas citadas por algunas fuentes, fue el  de alzar un valladar contra las posibles ambiciones expansionistas de los tarascos de Michhuacan -actual Estado de Michoacán-, que unos años antes habían atacado Xiquipilco -Jiquipilco-, aunque no lograron tomarlo.6 Conquistando esta rica zona agrícola se podría disponer de un territorio que proporcionase apoyo logístico y personal militar para una futura expansión hacia el oeste. Además, el momento era favorable por cuanto existían disensiones entre los tres principales centros del área, Tollocan, Matlatzinco y Tenantzinco. 

    El pretexto, que ya nos es conocido, para iniciar las hostilidades contra Tollocan fue la negativa de sus dirigentes a facilitar maderas de cedro y pino para la construcción de santuarios en Tenochtitlan

    El ejército invasor estaba constituído por tropas de las tres capitales de la Triple Alianza, así como de otras ciudades sujetas a las mismas. Después de la contienda Tollocan fue arrasada, su templo quemado y su dios principal llevado a Tenochtitlan. Fueron repartidas tierras entre las ciudades vencedoras y militares distinguidos, y hechos numerosos prisioneros para ser destinados al sacrificio.

    En esta primera campaña, alrededor de 1.475, fueron también conquistadas, entre otras, Xalatlauhco, Metepec, Teotenanco, Tzinacantepec, Tlacotepec, Callimayan, Clalixtlahuacan,  Atlapolco, Malacatepec, llegando tan lejos como hasta Tlaximalloyan y Matlatzinco, ambas en el actual Estado de Michoacán.

    A continuación, la siguiente campaña, hacia 1.476, se orientó al sur del Valle de Tollocan, tomándose entre otras poblaciones Tenantzinco, Ocuillan, Malinalco, Malinaltenanco, Temazcaltepec y Amatepec, todas ellas en el actual Estado de México; además de Oztoman, Chontalcoatlan  y Poctepec, en el actual Estado de Guerrero.

    Por último, en la tercera ronda de conquistas al norte del Valle, emprendida hacia 1.477, fueron tomadas las localidades de Xiquipilco, Xocotitlan, Chiapan y Xilotepec. Según Chimalpahin7, en la batalla contra Xiquipilco fueron muertos más de 6.000 combatientes y fueron hechos prisioneros 10.000 xiquipilcas, habiendo estado a punto de perecer Axayacatl, que fue herido de gravedad en una lucha cuerpo a cuerpo con un enemigo que le infligió una herida incisa en un muslo que le llegó hasta el hueso, y que según alguna fuente fue el motivo principal de su muerte posterior. 

 

    No se olvidaba Axayacatl de otros territorios. Aprovechando el eco alcanzado por sus éxitos militares en el oeste de la Cuenca, solicitó a las ciudades de Quiahuiztlan y Cempohuallan, en la costa del Golfo, la entrega de plumas para el festival de Tlatlauhqui Tezcatl -Espejo Rojo, una de las representaciones de Tezcatlipoca-. Conocidas las consecuencias de una negativa a tal petición, ambas ciudades se sometieron, accediendo a la misma, sin que fuese necesaria la presencia militar.


    Después de dominar el Valle de Toluca, los confederados en la Triple Alianza, posiblemente en 1.479, intentaron acabar con el pode-río tarasco. Sin embargo, tal tentativa se tradujo en un desastre bélico de proporciones no conocidas por la Alianza hasta la conquista de Tenochtitlan por las armas castellanas. Siguiendo a Durán8, se puede inferir que por unos 40.000 combatientes tarascos los aliados solo lograron reunir un ejército de unos 24.000 efectivos. El choque tuvo lugar en las cercanías de Tzicuéparo (sic) -actualmente Zinacuéparo-, entre Tlaximalloyan (Taximaroa, Ciudad Hidalgo) y Matlatzinco (Charo). La derrota de los confederados fue total; murieron más de 20.000 guerreros, retirándose los efectivos supervivientes hacia Ecatepec.


      Probablemente la derrota se debió a las complicaciones logísticas causadas por la lejanía de las ciudades de origen, que trajo consigo un insuficiente aprovisionamiento de armas y hombres de refresco, alternativa de la que gozaban generosamente las tropas tarascas, más cercanas a sus bases. Sin embargo, los tarascos no supieron o no pudieron aprovechar el éxito para continuar su expansión hacia Tenochtitlan. Hubieran debido hacer frente, debido a la lejanía, a las mismas dificultades logísticas que habían sufrido los invasores de su territorio. 

    Los michhuaque en ningún momento posterior llegaron a   ser vencidos por los poderes de la Cuenca, y a la llegada de los españoles se abstuvieron de prestar la ayuda solicitada por Motecuhzoma II en su guerra contra éstos.


Principales conquistas realizadas por Axayacatl hacia el Valle de Tollocan, al oeste y al sur del mismo. Los números no significan orden de conquista, sino referencia toponímica. Nombres actuales entre paréntesis.


 

1-Tollocan  (Toluca);   2-Xallatlauhco  (Jalatlaco);  3-Mete-

pec (Metepec);  4-Teotenanco  (Tenango de Arista); 5- Tzina-

cantepec (San Miguel Zinacantepec);  6- Tlacotepec  (Santia-

go Tlacotepec);   7- Callimayan  (Calimaya de Díaz González);

8-Calixtlahuacan (Calixtlahuaca);  9-Atlapolco  (San Pedro

Atlapulco); 10-Malacatepec (San José Villa de Allende);  11-

Tlaximalloyan  (Taximaroa,  Ciudad  Hidalgo);    12- Matla-

tzinco (Charo).

 

13-Tenantzinco (Tenancingo de Degollado); 14-Ocuillan (O-

cuilan de Arteaga);   15-Malinalco  (Malinalco);  16-Malinal-

tenanco (Malinaltenanco);  17-Temazcaltepec  (Temascalte-

pec);   18-Oztoman  (Oztuma);   19-Amatepec   (Amatepec);

20-Chontalcoatlan  (Chontalcoatlán);  21-Poctepec.

 

22-Xiquipilco  (Jiquipilco el Viejo);   23-Xocotitlan  (Joco-

titlán);  24-Chiapan (Chapa de Mota);   25-Xilotepec (Jilo-

tépec de Molina Enríquez).

 


Un año después del desastroso enfrentamiento con los tarascos y con motivo, según las fuentes, de la inauguración del cuauhxicalli9 del templo de Huitzilopochtli, se emprendió una guerra florida contra Tliliuhquitepec, ciudad cercana a Zacatlán (en el Estado de Puebla), para obtener cautivos que sacrificar. Según Durán10, las tropas aliadas perdieron cuatrocientos veinte efectivos, pero se tomaron setecientos enemigos, que fueron sacrificados, algunos de ellos directamente por Axayacatl y Tlacaelel

La última campaña se dirigió a la Huaxteca para reconquistar Tochpan, que se había rebelado y donde habían sido asesinados unos mercaderes mexicas y tetzcocanos. También se tomaron, entre otras, las ciudades de Tzapotitlan, Xiuhcoac y Micquetlan.

Un amante de las artes

Axayacatl falleció ca. 1.481, no mucho después de la derrota de la Triple Alianza frente a los tarascos, habiendo dirigido los destinos de su tlahtohcayotl trece años aproximadamente, durante los cuales consolidó las conquistas de su antecesor, sumó los territorios del Valle de Toluca, y anexó a Tenochtitlan la ciudad hermana de Tlaltelolco

Tenochtitlan-Tlatelolco, a la que me referiré en lo sucesivo como Mexico-Tenochtitlan, se convirtió en la urbe más grande y poderosa de América en la que,  gracias a su tamaño y a la riqueza proporcionada por los tributos, florecieron las diversas artes, desde el tallado de la piedra a la orfebrería y desde la plumajería a la poesía.

            En el corto tiempo de su mandato, no sólo se dedicó Axayacatl a reafirmar y aumentar las conquistas de sus predecesores, sino que favoreció a las artes en general, y de él mismo destaca su afición a la poesía, de la que se conservan dos poemas, uno dedicado a la evocación de sus antepasados y un canto triste compuesto tras la derrota de sus tropas ante los tarascos.

Como sus antecesores, este tlahtoani dejó su sello en la renovación del Huei Teocalli -Templo Mayor-, agrandando la plataforma sobre la que se sustentaba y ampliando la doble escalinata que conducía a los adoratorios de Huitzilopochtli y Tlaloc.

En la actualidad, de esta etapa constructiva, que los arqueólogos denominan Etapa IV B (hacia 1.469-1.470), sólo quedan algunos restos del basamento del Templo y unos cuantos peldaños de las escaleras. Desde el suelo del centro ceremonial se subía al basamento por cuatro escalones que hoy en día se pueden observar y en cuyos extremos hay serpientes de cuerpo ondulado. 

Del lado del adoratorio de Tlaloc los cuatro escalones anteriores se ven cortados por un pequeño altar denominado de las ranas,  por tener dos de estos anfibios, que representaban la lluvia y estaban ligados a este dios. Las escalinatas principales que ascendían hacia lo alto de la pirámide estaban separadas por alfardas rematadas en cabezas de serpientes que aún conservan su policromía original.



Fase Constructiva IV B del Templo Mayor. Escalones que dan acceso a la plata-forma. Al fondo el llamado altar de las ranas. En primer plano, cabeza  de ser- piente.

 Figura 23.- Escultura de la Coyolxauhqui. La coloración de la misma fue representada a través de análisis de restos de pigmentos originales

Pero el monolito más destacado de esta época fue la escultura circular de la diosa Coyolxauhqui, hallada en 1.978 en la base de la escalinata que conducía al adoratorio de Huitzilopochtli. Con este esquema del dios arriba y la diosa abajo se pretendía simbolizar la muerte y desmembramiento de ésta por su hermano, que la arrojó desde lo alto del cerro de Coatepec; cerro representado en este caso por el Templo Mayor.

Este hecho se solía escenificar en el ritual celebrado en la fiesta de Panquetzaliztli en honor de Huitzilopochtli. En él se sacrificaban a prisioneros delante del adoratorio del dios y sus cuerpos eran arrojados escaleras abajo del Templo hasta caer sobre la estatua de Coyolxauhqui.

A la muerte de Axayacatl fue elegido como tlahtoani su hermano mayor Tizoc, que desempeñaba el cargo de tlacatecatl -comandante en jefe del ejército-, lo que facilitó, junto a su noble nacimiento y juventud, el nombramiento como máximo dirigente mexica.


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1. Anales de Tlatelolco. CONACULTA. Colección Cien de México. Primera edición Méxi-co 2004. Paleografía y traducción de Rafael Tena. p. 95.

2. Anales de Tlatelolco. CONACULTA. Colección Cien de México. Primera edición México 2004. Paleografía y traducción de Rafael Tena. p. 95.

3. Alvarado Tezozomoc: Crónica Mexicayotl. En Tres crónicas mexicanas. Paleografía y traducción Rafael Tena. CONACULTA. Colección Cien de México. México 2012. pp. 109-111.

4. Domingo Francisco de San Antón Muñón Chimalpahin Cuauhtlehuanitzin: Las Ocho Relaciones y el Memorial de Colhuacan. Ed. CONACULTA. México 2003, 1ª reimpresión. Vol II. Séptima Relación. pp. 99 y 115.

5. Los conquistadores españoles y cronistas de aquel tiempo llamaban Mar Océano al Océano Atlántico, y Mar del Sur al Océano Pacífico.

6. El pueblo tarasco se llamaba a sí mismo purépecha. La palabra tarasco la usaron los españoles; se deriva de tarascue en su lengua, que significa yernos, y la utilizaron para denominar a algunos conquistadores que se habían unido con mujeres nativas. Vid. Relación de Michoacán. Ed. Dastin. Madrid 2002. p. 263.
Los mexicas llamaban a los tarascos michhuaque “habitantes del lugar donde abundan los pescados”.


7. Chimalpahin: Ob. cit. Vol. II. Séptima Relación. p. 107.

8. Fray Diego Durán: Historia de las Indias de Nueva España e islas de Tierra Firme I. CONACULTA. Cien de México. Primera reimpresión. 2002. México. pp. 337-342.

9. Cuauxicalli: recipiente de piedra usado por los mexica para contener los corazones humanos de los sacrificados a sus dioses.

10. Fray Diego Durán: Ob. cit. Vol I. pp. 347-351.